Cuando se produce una emergencia es necesario que todo el mundo sepa qué debe hacer. No es momento de improvisar, sino de tener claro cómo actuar. Para conseguirlo la preparación es esencial. Por eso, te vamos a mostrar cómo hacer paso a paso un plan de evacuación.
¿Cómo diseñar un plan de evacuación?
Es recomendable que la elaboración de un plan de evacuación la lleve a cabo una empresa experta en el tema, porque esta sabrá valorar mejor cuales son los riesgos a los que se pueden exponer los trabajadores y cómo evitarlos. Pero si, aun así, te interesa conocer cómo se debe crear, te indicamos todos los pasos a seguir.
Es fundamental contar con planos del centro de trabajo. En ellos deben señalizarse cuáles son las vías de evacuación o dónde se encuentran los medios de protección. Cuando se cree el plano del edificio general también se debe indicar cuál es el nombre de las calles que rodean el edificio y dónde se puede establecer un punto de concentración si el edificio es evacuado.
También deben en el plano cuáles son las salidas al exterior e indicar por medio de flechas el recorrido para evacuar el edificio. Después hay que crear un plano por planta que incluya las paredes, las puertas o las escaleras. Hay que marcar por medio de flechas el camino para salir.
También es necesario marcar dónde se encuentran tanto los pulsadores de alarmas, como los extintores o las bocas de incendios.
Redactar todos los puntos del plan de evacuación
Hay que incluir los datos más importantes, como puede ser el nombre de la empresa, del edificio y el número de trabajadores. Es necesario identificar las distintas zonas, describirlas y señalizar todos los datos que sea necesario tener en cuenta. También es preciso identificar las distintas instalaciones que existen para la protección de incendios.
Otro punto vital es describir los diferentes riesgos del edificio. Se deben clasificar por su gravedad, riesgo bajo, medio o alto. Por ejemplo, un depósito de combustible o un almacén con productos químicos serán clasificados como de riesgo alto.
También sería adecuado evaluar los riesgos externos. Por ejemplo, de sufrir un inundación o un terremoto, sin olvidar que hay que tener en cuenta el entorno que rodea el edificio (por ejemplo, si hay cerca una gasolinera, un almacén de productos tóxicos o el mar está próximo).
¿Cómo se debe actuar?
Cuando ya se tienen claros todos los riesgos, se debe redactar un plan de actuación. Es necesario establecer quién será el responsable en caso de emergencia y evacuación. Se debe determinar cuáles serán sus responsabilidades (contar los trabajadores, avisar a emergencias, bloquear tanto los ascensores como los montacargas, cerrar los sistemas de ventilación cerrar la llave de paso general de la electricidad y del gas, etc.).
Después, se establecerá el procedimiento que será necesario seguir para evacuar el edificio. Es posible que en algunos casos se opte por la confinación (refugiarse en alguna parte segura de las instalaciones): en este ese caso hay que indicar en qué casos se hará y en qué lugar se producirá.
Es importante determinar qué se hará si la vía principal de evacuación está obstruida. Tampoco se puede pasar por alto que es necesario establecer cómo se actuará con las personas que tienen movilidad reducida.
Por supuesto, en el plan deben aparecer los teléfonos de los principales servicios de emergencias, junto al responsable o responsables designados de dar la alerta.
Finalmente será necesario establecer cuándo se producirán simulacros de evacuación y hacer los planes necesarios para que participen todos los trabajadores. Este tipo de acciones son muy útiles a la hora de determinar si están preparados de manera adecuada para hacer frente a una emergencia.
Está claro que todas las empresas o edificios en los que se concentre el público deben contar con un plan de evacuación, que a su vez se debe integrar en el Plan de Prevención de Riesgos Laborales con el que todas las empresas deben contar.